Cuatro razones por las que la vitamina C es importante

Hablemos de la realidad que está detrás de la vitamina C. Sí, muchas evidencias científicas aclaman los beneficios que aporta la vitamina C para apoyar el sistema inmunológico, pero ésta no es la única función que cumple este micronutriente. Son muchas las formas en las que nuestro cuerpo aprovecha la vitamina C.

Protección antioxidante

Cuando están presentes en nuestro cuerpo, los antioxidantes desinteresadamente se sacrifican para proteger nuestras células. Voluntariamente ceden sus propios electrones para moderar las cantidades excesivas de radicales libres que se ha determinado son la causa del daño oxidante. 

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Mantener niveles adecuados de vitamina C puede ayudarnos a estar seguros de contar con un sólido ejército a manera de defensa antioxidante.

Piezas fundamentales

La vitamina C también es esencial para la síntesis del colágeno, que es la proteína estructural más abundante en el cuerpo y es esencial para desarrollar y fortalecer los músculos, los dientes, los huesos, la piel y los vasos sanguíneos. Si no contamos con niveles adecuados de vitamina C, al cuerpo se le dificulta la producción adecuada de colágeno. En condiciones normales, la ingesta diaria recomendada de 75-90mg al día cumple los requisitos para mantener suficientes cantidades de colágeno. 

Ahora, veamos lo referente al sistema inmunológico 

Hay demasiada evidencia en conflicto, pero tratándose de la vitamina C, es ampliamente reconocido el hecho de que esta vitamina es un nutriente importante para mantener un sano funcionamiento inmunológico, efecto que logra mediante la estimulación tanto de la producción como del funcionamiento de los leucocitos, es decir, de los glóbulos blancos. 

¿De dónde podemos obtenerla?

Tal vez debimos haber mencionado esto antes, pero ¿sabía que nuestro cuerpo no puede producir vitamina C? Esto significa que dependemos totalmente de nuestra alimentación para satisfacer nuestros requerimientos diarios de esta vitamina. 

Alimentos tales como las naranjas, las moras, la papaya, el kiwi, los pimientos, los tomates, los chícharos y los vegetales de hojas color verde obscuro contienen, todos, elevadas cantidades de vitamina C que nuestro cuerpo puede absorber. 

Así que aquí tiene cuatro buenas razones para asegurarse de consumir suficientes cantidades de vitamina C a través de su alimentación regular.

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Estas afirmaciones no han sido evaluadas por la Administración de Fármacos y Alimentos de los Estados Unidos. Este producto no tiene como fin diagnosticar, tratar, curar ni prevenir enfermedad alguna.