Dejando los complejos

Que si eres alto, que si eres bajo, que si usas lentes, que si eres china y quieres ser lacia, que si eres lacia y quieres ser china, q si mi amiga quien a mi punto de vista es más fea que yo trae un mejor galán.

Estas y muchas más frases se escuchan en el transcurso de los días, pero ¿qué es lo que nos provoca no sentirnos bien con nosotros mismos? ¿Sera que en el camino d la perfección nos hemos olvidado de aquellas raíces de las que venimos?

¿Sera acaso ese el motivo por el cual cada día más personas invierten en costosas cirujanas plásticas? Las cuales supongo yo al terminar y verse al espejo te dejan irreconocible, creo q seria aún más grande el trauma de ver en el espejo a esa persona que jamás en tu vida has visto pero que más sin embargo tienes frente a ti e incluso puedes sentirla, sientes su respiración, ¿qué es lo que nos motiva a realizar esos actos tan vandálicos?

En una ocasión un profe nos preguntó ¿qué animal nos gustaría ser? Como se podrán imaginar cada uno de nosotros respondimos según sus gustos por cada animal, al terminar todos le preguntamos a el que animal le gustaría ser y el respondió que la única respuesta y la más adecuada seria ser el mismo.

Y así es a veces se nos olvida la maravillosa especie que somos, al ser la especie dominante del planeta, al poder tener sueños los que hacen que luchemos por lograrlos, así como poder crear cosas a partir d los mismos, y aun así no aceptamos ser quienes somos.

Eso es ser realmente extraordinarios, ¿has visto como nos observan nuestras mascotas? Y nosotros mismos no podemos ver lo magníficos que somos.

Y aun así nos atrevemos a tratar d cambiar las cosas, acéptate tal como eres, lucha por lograr tus sueños a pesar de lo que los demás te digan, ellos no serán quienes se sientan realizados, ellos decidieron ser como la mayoría y seguir viviendo con sus complejos, ellos prefieren vivir en su mundo de mediocridad, y no permitas que te arrastren con ellos, recuerda que a los cangrejos les fusta jalar para que no escapes y sigas preso en ese fango de mediocridad.

Recuerda que eres imagen y semejanza de tu fuente creadora no importa la religión en la que creas, tu eres grande, fantástico y tienes el don de soñar y buscar obtener esos sueños.